Arroz de marisco al horno

Receta ↓ Ángela Solar

¡Sorprende a todos con un arroz de marisco al horno que es pura magia! En tan solo unos pasos simples, podrás degustar un plato lleno de sabor y tradición.

Este arroz, cargado de los más frescos mariscos y aromatizado con hierbas del Mediterráneo, es la opción ideal para una comida inolvidable. Rápido, fácil y absolutamente delicioso, es perfecto para cualquier celebración o para darle un toque especial a tus días.

Ingredientes esenciales

¿Estás listo para convertirte en el maestro del arroz de marisco al horno? ¡Vamos allá! Esta es tu lista de indispensables para crear una obra maestra culinaria que dejará a todos con la boca abierta.

Mariscos: el alma de nuestro plato. Escoge gambas jugosas, almejas con sabor a mar y mejillones que parecen cantar sirenas. ¿Y por qué no dar un giro sorprendente con un poco de sepia o calamar? ¡Sé el Picasso de tu paella!

El arroz debe ser capaz de abrazar cada aroma, así que opta por 400 gramos de una variedad como el bomba o el arborio, que son verdaderos campeones en retener el sabor.

Los vegetales aportarán esa explosión de color y frescura. ¿Has visto alguna vez un pimiento rojo más vibrante? ¡Eso es pasión en estado puro! Añade también tomates que sepan a verano, una cebolla que haga bailar tus sentidos y, claro está, no escatimes en ajo.

Para rematar, un generoso chorro de aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal y pimienta para enamorar a tus papilas gustativas. Y si te atreves, una cucharadita de pimentón para darle ese toque de magia.

Con estos ingredientes en tu poder, ¿quién necesita una varita mágica? ¡Tú tienes la receta para hechizar paladares!

Preparación del marisco

¡Vamos a darle sabor al marisco como nunca antes! Imagina que estás en la orilla del mar, seleccionando con tus propias manos esos mariscos que harán que tu arroz al horno sea inolvidable. Escoge piezas que te hablen de frescura y mar; esos camarones que parecen saltar, esas almejas que guardan el secreto del océano.

Cuando tengas tus tesoros del mar listos, es el momento de la limpieza. Yo siempre pongo mi música favorita y me tomo este paso con calma, es como una meditación.

Lava cada pieza con cariño, como si les prepararas para un gran estreno. Después, viene mi parte favorita: el marinado. Me encanta crear una mezcla de aceite de oliva virgen extra, ajo picado, perejil fresco y un toque de pimentón que hace bailar los sentidos.

Si tienes mariscos que requieren un poco de cocción previa, como los mejillones, dale solo un hervor hasta que se abran y liberen su esencia al vapor.

Y aquí va mi secreto personal: un buen chorro de vino blanco en el marinado no solo aporta sabor, sino que te invita a brindar por la cocina que amas. ¡No olvides reservar un poco para ti y tus acompañantes!

Elaboración del arroz

¡Imagina que estás en Valencia, cuna del arroz, mientras preparas este plato estrella! Yo aprendí a sofreír el arroz de la mano de una querida amiga valenciana, y desde entonces, ¡es mi ritual sagrado en la cocina!

Empieza calentando aceite de oliva en una sartén y añade el arroz. Escucharás un chisporroteo que es música para los oídos. Ese dorado ligero es el secreto de un arroz con carácter.

¿Y los vegetales? Pues, mi amiga siempre decía: "El sofrito sin tomate no es sofrito". Así que no escatimes en tomate, pimiento y ajo, ¡y si te atreves, un toque de guindilla para una explosión de sabor!

El momento de la verdad llega al cocer el arroz. ¡Tiene que estar "al dente"! Recuerdo que al principio siempre me pasaba de cocción, pero con paciencia y práctica, darás con ese punto perfecto donde el arroz está listo para absorber todos los jugos en el horno.

¡Es un antes y un después en la vida de cualquier arrocero!

Y no te cortes en probar cosas nuevas. ¿Has pensado en añadir unas hebras de azafrán o un ramillete de romero? Cada vez que cocino, me gusta pensar que estoy creando una obra de arte. Así que, ¡manos a la obra y a dejar volar tu imaginación!

Montaje y horneado

¡Es hora de que tu arroz de marisco se convierta en una obra maestra culinaria! Piensa en tu fuente para horno como el lienzo y en los ingredientes como los colores con los que vas a pintar.

Empieza por esparcir una capa uniforme de arroz, y luego coloca los mariscos estratégicamente, asegurándote de que cada rincón esté repleto de sabor. Recuerda, la abundancia es la clave aquí; queremos que el marisco sea el protagonista indiscutible.

Para el horneado, tu horno debe estar caliente y listo a 200°C. Introduce la fuente y hornea por unos 10 minutos, o hasta que el arroz adquiera ese deseado tono dorado y esa textura crujiente que tanto nos gusta. Este es un truquito que siempre me funciona, ¡y seguro que a ti también te encantará!

Y un último consejo, mantén un ojo en el horno para evitar que el arroz se pase. Si te animas a ser un poco aventurero, añade un toque de azafrán al cocer el arroz; te prometo que el resultado será ¡espectacular!

Consejos y trucos

¡Prepárate para enamorarte perdidamente de este arroz de marisco al horno! La elección del arroz no es un juego, es una decisión de peso. Yo, sin ir más lejos, me decanto por un arroz bomba que nunca me falla; se hincha absorbiendo los jugos del marisco y queda al dente, simplemente sublime.

Y hablando de mariscos, ¿queréis saber el truco de la abuela para que queden tiernos y aromáticos? Marinadlos con amor en una mezcla de aceite de oliva virgen extra, ajo recién machacado, perejil fresco y un buen chorro de limón.

Dejad que reposen y se bañen en esos sabores antes de darles calor, y cada bocado será un viaje al mar.

La personalización de este plato es un lienzo en blanco esperando vuestras pinceladas. ¿Que tenéis unos carabineros en la nevera? ¡Al arroz que van! ¿Unas vieiras? ¡Bienvenidas sean!

Cada marisco es un nuevo capítulo de sabor. Os animo a jugar con las posibilidades y a crear una obra maestra que os transporte a las costas de nuestra querida España cada vez que la saboreéis.